Desojaba margaritas, presa del silencio
encantaba lagrimas ocultas de sollozos ignotos.
Remontada en barriletes de mil colores;
contaba las pequeñas casas, que ya no son de nadie.
Desarraigada por completo de identidad cualquiera,
no quiero pertenecer a ningún mundo, a
ninguna religión.
Las creencias se convirtieron en falacias,
las ideologías en ficción,
el amor se ha acartonado,
y el odio mendiga perdición.
Desojaba margaritas, presa del silencio,
sin creencia ni religión
contando colores vacíos
de sueños sin amor.
En silencio leo tu profundo poema Noelia.
ResponderEliminarte dejo mis saludos.
feliz fin de semana.
Muchas gracias Ricardo, igualmente.
ResponderEliminarYa te sigo y te deseo una feliz semana
ResponderEliminarcon gran afecto
un abrazo
Marina
Muchas gracias Marina,por tus visitas a mi blog. Abrazos.
ResponderEliminarMe cae bien.
ResponderEliminarEn cierto sentido yo hago lo mismo.
Besos.
gracias toro, como siempre.Abrazos.
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